Silo es el guía espiritual que surge en este tiempo convulsionado, violento y desesperanzado. Su mensaje es simple y profundo al mismo tiempo. Su obra ha trascendido todas las fronteras y sus seguidores están en las más diversas culturas de todos los continentes.
En 1969 comienza la vida pública de Silo con dos hechos fundamentales: una arenga dada el 4 de mayo en un pueblito cordillerano situado en la frontera de Argentina y Chile llamado Punta de Vacas, ante un puñado de personas: La curación del sufrimiento. En ese mismo lugar escribe La Mirada Interna, libro publicado el año 1972. Ambos, la alocución y el libro, son la piedra angular de su enseñanza. En la primera plantea la raíz del sufrimiento “…únicamente puedes acabar con la violencia en ti y en los demás y en el mundo que te rodea, por la fe interna y la meditación interna…” mientras que en La Mirada Interna desarrolla cual es el verdadero sentido de la vida. “Aquí se cuenta cómo al sinsentido de la vida se lo convierte en sentido y plenitud. / Aquí hay alegría, amor al cuerpo, a la naturaleza, a la humanidad y al espíritu. / Aquí se reniega de los sacrificios, del sentimiento de culpa y de las amenazas de ultratumba. /Aquí no se opone lo terreno a lo eterno. /Aquí se habla de la revelación interior a la que llega todo aquel que cuidadosamente medita en humilde búsqueda.”
Con los años, Silo se mantuvo profundizando en este complejo camino de conocimiento interno, para desde ahí poder hacerle frente a la violencia física, social y económica. Ha dado charlas, conferencias y ha participado en encuentros masivos en los que ha expresado sus puntos de vista y enseñanzas a cientos de miles de personas desde México a Bombay, de Paris a Moscú, de Manila a Copenhague, en Sri Lanka y en Nápoles, Nueva York y Quito.
Por todo el mundo se suman adherentes a sus planteos de esperanza, de posibilidad de cambio, de certeza en que el ser humano puede definitivamente devenir en un verdadero ser humano, dejando atrás la prehistoria de sufrimiento, de nihilismo y violencia.